Al final de su libro “Tratado
sobre el Fuego Cósmico”, Alice Bailey puso un diagrama donde
supuestamente el Maestro Djwal Khul describe a la Jerarquía planetaria
terrestre, y en ese gráfico aparece el Maestro Veneciano como director del
tercer rayo y jefe de:
-
El Maestro Serapis (4)
-
El Maestro Hilarión (5)
-
El Maestro Jesús (6)
-
Y el Maestro R. [que es el Conde de Saint
Germain] (7)
(Esto se encuentra en la tercera parte titulada: “El Fuego eléctrico del Espíritu”, en la
sección A, titulada: “Ciertos enunciados
básicos”, pg. 1238)
¡PERO
RESULTA QUE TODO ESO ES FALSO!
¿Entonces por qué lo publicó Alice Bailey?
Porque se lo copió a Leadbeater el cual en su libro “Los Maestros y el Sendero” puso la
siguiente clasificación:
· Morya es
el jefe del 1º Rayo
· Kuthumi
es el jefe del 2º Rayo
· El
Veneciano es el jefe del 3º Rayo
· Serapis
es el jefe del 4º Rayo
· Hilarión
es el jefe del 5º Rayo
· Jesús es
el jefe del 6º Rayo
· Y el
Conde de Saint Germain es el jefe del 7º Rayo.
(Esto se encuentra en el capítulo XII titulado: “Los chohanes y los rayos”)
Y como lo pueden constatar, los rayos que le asignó
Leadbeater a esos Adeptos, son los mismos rayos que Alice Bailey les asignó
también a los mismos Maestros. El detalle es que esa clasificación es puro
invento y en este (link) se los demuestro. Mientras
que aquí, a continuación les voy a explicar más en detalle porque en realidad
el “Maestro el Veneciano” no existe.
Verán, para elaborar su clasificación, Leadbeater primero
tomo los nombres de los Maestros que eran más conocidos en la Sociedad
Teosófica y que son: Morya, Kuthumi, Serapis e Hilarión.
También incluyó a Jesús para atraer al público cristiano
y también incorporó al Conde de Saint Germain para complacer a Annie Besant
(quien en esa época era la Presidenta de la Sociedad Teosófica de Adyar) y ella
estaba muy fascinada por ese personaje histórico, al grado que en un viaje que
ella efectuó hacia Europa en 1925 (ya que en ese entonces la señora Besant
vivía en la India) ella quiso aprovechar para visitar el castillo del Conde en
Transilvania, aunque al final no se pudo.
Pero como son siete rayos, a Leadbeater le faltaba un
“jefe” más que poner. El problema es que ya no conocía más nombres de Maestros.
Entonces se puso a buscar en la literatura teosófica a ver a quién podía añadir
y cuando leyó el Diario del coronel Olcott, encontró esto:
« La manera como se da el primer encuentro con los
Maestros de Sabiduría varía. Algunos discípulos como Damodar y Blavatsky, ellos
vieron por primera vez a los Maestros a través de visiones cuando eran jóvenes,
mientras que otros discípulos se encontraron con ellos bajo extrañas
circunstancias y en los lugares menos probables. Pero en mi caso, Blavatsky me
los fue paulatinamente introduciendo por medio del gran interés que yo tenía en
ese entonces hacia el espiritismo y la mediúmnidad.
Y es por eso que inicialmente ella le atribuyó esos
fenómenos que se producían a su alrededor, al espíritu de John King (el cual
era muy conocido en las sesiones espiritistas) y fue sólo después y a través de
una progresiva amistad que fui entamando con esos Adeptos que yo comencé a
tener una comunicación personal y directa con ellos.
Y es así que en una ocasión “John King” me hizo conocer a
cuatro de los Maestros, de los cuales:
-
uno era un copto (o sea un egipcio
cristiano),
-
otro era un representante de la escuela
neoplatónica de Alejandría,
-
otro tenía un puesto muy elevado ya que era
el Maestro de los Maestros, por decirlo así: un Veneciano,
-
y el último era un filósofo inglés que había
desaparecido de la mirada de los hombres, pero que no estaba muerto.
Y el primero de ellos se volvió mi primer gurú. »
(Viejas Hojas del Diario, vol. I, p. 17-19, extractos)
Y es en base a este texto que Leadbeater decidió que el
jefe del tercer rayo iba a ser “el Veneciano”. Pero resulta que “el Veneciano”
en realidad es Serapis, ya que Serapis es el Maestro de grado superior (“el Maestro
de los Maestros”) que estuvo directamente a cargo del resurgimiento del
Movimiento Teosófico a finales del siglo XIX y por lo tanto era lógico que se
presentara ante Olcott, ya que el coronel Olcott fue el primer presidente de la
Sociedad Teosófica. Y también era lógico que el coronel Olcott no conociera el
nombre de Serapis la primera vez que lo vio y que por eso lo describirá como
“un Veneciano”.
Sin embargo Olcott nunca más volvió a mencionar al “Maestro
el Veneciano” pero en cambio sí mencionó varias veces al Maestro Serapis.
Por ejemplo:
« [Serapis] es uno de nuestros Maestros más venerados, ya
que es el Maestro de nuestros Maestros. En la India a alguien así se le llama
un Paramagurú (que significa un guía
espiritual superior). Y me dio un pequeño boceto a colores de él mismo, cuando
estaba en Nueva York, antes de que Blavatsky y yo nos embarcáramos para
Bombay. »
(Viejas Hojas de Diario, vol. 2, p.430-431, extractos)
« Serapis es el más joven de los Directores de la
jerarquía de los Maestros. »
(Carta Mahatma 3A, p.10)
Y como les dije, el coronel Olcott nunca más volvió a
mencionar de “un maestro veneciano” y en ninguna otra parte de la enseñanza
teosófica original aparece la existencia de un miembro de la Fraternidad de los
Maestros al quien se le conociera como “el Veneciano”. En cambio sí se menciona
con bastante frecuencia al Maestro superior Serapis.
(Y lo que se menciona sobre él lo puse en este capítulo: ¿Quién es Serapis Bey?)
Pero para infortunio de Leadbeater, esa información de
que Serapis es un Maestro de nivel superior y también que es el jefe de
Kuthumi, Morya e Hilarión sólo se supo después, por lo que Leadbeater ignorando
ese hecho, posicionó a Serapis en el mismo rango que los otros Maestros,
mostrando con ello su superchería.
Y Alice
Bailey ignorando todo esto, creyó lo que afirmó Leadbeater y por eso escribió
las mismas falsedades.
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