José Ramón Sordo es uno
de los esoteristas más eruditos que he conocido y en una ocasión él le escribió
una carta al editor de la revista “High Country Theosophist” en
donde daba su opinión sobre las enseñanzas de Alice Bailey.
Y debido a lo
interesante de su contenido, Richard Slusser (el editor) publicó esa carta en
su revista, en la edición de abril del año 2001 (link) y a continuación les traduzco las
partes principales:
Recientemente
hemos recibido una carta de un investigador que está tan bien enfocada, elaborada
y que además plantea muchas preguntas interesantes, que hemos decidido ponerla
como nuestro tema principal de esta publicación.
La
carta la dividimos en tres partes para facilitar su lectura y darles tiempo a
nuestros lectores para reflexionarla y ponderarla. Y estas partes son:
1. Un incorrecto uso del yoga y de la
meditación por Alice Bailey
2. Acerca de los rayos
3. Los errores de la enseñanza de Alice Bailey
A) Alice Bailey
copió los errores que inventó Leadbeater
B) Los dos tienen un
sabor muy similar con respecto a la iglesia
C) Mismas ideas con
los rayos
4. Conclusión
1. UN
INCORRECTO USO DEL YOGA Y LA MEDITACIÓN POR ALICE BAILEY
Estimado
Richard,
Siguiendo
tu invitación al diálogo, me gustaría hacer algunos comentarios en conexión con
la respuesta que hiciste a la carta de Carlos Aveline, en tu revista de
diciembre del año 2000 (pág. 19).
En
el punto número 4 tú dices:
« Nosotros hacemos una
distinción entre los temas que fueron etiquetados por parte de los Maestros y
por Blavatsky como errores (y efectuados incorrectamente por los aprendices)…»
Pero
al final de este párrafo tú agregas:
«…también incluye la necesidad
de emprender…métodos del Hatha Yoga…»
Por
lo que permíteme señalarte que aquí detecto una contradicción de tu parte, ya que
el Hatha Yoga está entre los temas claramente etiquetados como errores por los
Maestros y por Blavatsky.
Y para demostrártelo déjame citar lo que
dice el Maestro Kuthumi y tres discípulos importantes del Maestro Morya:
« Suby Ram es un hombre
verdaderamente bueno, pero él es devoto de un error, ya que no es la voz de su gurú
la que escucha en su interior, sino su
propia voz. Y aunque es la voz de un alma pura, generosa y fervorosa, él
se encuentra absorto en un misticismo engañoso erróneamente encaminado.
Agrega
a esto un desorden crónico en esa porción del cerebro que responde a la visión
clara y tendrás pronto la razón de su desorden: ese desorden fue desarrollado
por forzar la visión mediúmnica por medio del Hatha Yoga. »
(Maestro
Kuthumi, Carta Mahatma Nº40, p. 255)
« Tal es entonces la
ciencia oculta sobre la que los modernos ascetas y yoguis de la India basan el desarrollo y
poderes de su alma. Ellos son conocidos como los hatha yogîs. Pero ahora la
ciencia del Hatha Yoga descansa sobre la “supresión del aliento” o Prânâyâma a
cuyo ejercicio nuestros Maestros se oponen unánimemente porque:
¿Qué es el Prânâyâma?
Traducido
literalmente significa “la muerte del aliento de vida”. Pero si se siguen
dichas indicaciones, ellas solamente pueden conducir hacia la mediúmnidad e
incluso hacia la magia negra.
Varios
discípulos impacientes a quienes conocimos personalmente en la India, a pesar
de nuestras advertencias se pusieron a hacer Hatha Yoga. De estos, dos de ellos
desarrollaron consunción de la cual uno murió, los otros dos se hicieron casi
idiotas y otro se suicidó, y uno se volvió un mago negro, pero afortunadamente
para él mismo su carrera fue truncada por la muerte. »
(Blavatsky, Collected Writings, T.P.H., Vol.
XII, p. 614-615)
« Estos intentos en el “yoga
práctico” (tal como se le denomina) pueden ser peligrosos, ya que es bien
sabido que las posturas que se efectúan, incluso cuando se usan ignorantemente,
pueden acarrear cambios fisiológicos en el cuerpo y grandes trastornos
nerviosos.
El estudio sincero de
la filosofía y de las reglas del sistema de Yoga de Patanjali puede ser tomado
por cualquier teósofo, pero bajo una condición: que el discípulo practique la
Hermandad Universal. Y es que el altruismo debe convertirse en el objeto de la
vida, ya que de otra forma todas las prácticas estarán absolutamente vacías de
un efecto duradero.
Los
Maestros han dicho claramente que los poderes ocultos pueden obtenerse, pero que
ellos NO pueden comunicar sus secretos a menos de que los miembros prediquen,
enseñen y practiquen el altruismo. Y mientras que pongamos empeño por entender
y practicar las enseñanzas que ellos nos han dado y vivamos correctamente, cada
investigador puede dedicar algo de su tiempo a la meditación y concentración
diaria. »
(William
Judge, Ecos del Oriente, vol. II, p. 234 y 400-401, extractos)
« Parece prevalecer un
malentendido general sobre lo
que es la contemplación. La gente cree que debe de ponerse a mirar de manera
pasiva la punta de su propia nariz, o un punto en la pared, o quizás un
cristal, y piensan que tal método corresponde a la verdadera forma de contemplación
mandada por el Raja Yoga.
Desafortunadamente
muchos de esos individuos no llegan a darse cuenta de que el verdadero
ocultismo requiere de un desarrollo físico, mental, moral y espiritual que se
generen al mismo tiempo, y se lastiman a sí mismos física y espiritualmente,
practicando lo que equivocadamente creen ser de la meditación.
Y
a continuación les mencionaré un ejemplo de ello como una advertencia para los
estudiantes demasiado fervorosos:
En
la ciudad de Bareilly conocí a un miembro de la Sociedad Teosófica
de Farrukhabad, quien me narró sus experiencias y derramó lágrimas amargas de
arrepentimiento por sus locuras pasadas (tal como él mismo las calificó).
Hace
unos quince o veinte años atrás habiendo leído acerca de la contemplación en la
Bhagavad Gita, él comenzó su práctica sin una adecuada comprensión del aspecto
esotérico y estuvo practicando la contemplación por varios años. Al principio
experimentó un sentido de placer, pero simultáneamente encontró que
gradualmente iba perdiendo control de sí mismo hasta que después de algunos
años descubrió para su gran asombro que
ya no era el dueño de su propio cuerpo. »
(Damodar Mavalankar, Cinco Años de Teosofía,
p. 40-41)
[Nota del traductor: la razón
por la que ese individuo fue perdiendo el control de su ser, es porque al practicar
incorrectamente la contemplación, se inducia él mismo en un estado de trance
que le hacia bajar sus defensas internas y es así como entidades ajenas fueron
invadiéndolo. Este asunto lo detallo más en el capítulo: “¿Cómo protegerse para meditar sin peligro?” (link)]
2. ACERCA DE LOS RAYOS
Por
supuesto que hay muchos asuntos que no fueron tratados por Blavatsky y sus
Maestros, y esto tiene
una razón ya que en “La
Doctrina Secreta” se enuncia que:
« Ahora se permite que
vea la luz (después de largos milenios del más profundo silencio y secreto) el
bosquejo de unas cuantas verdades fundamentales de la Enseñanza Esotérica dada
desde las edades Arcaicas, y preciso intencionalmente “unas pocas verdades”
porque aquello que debe permanecer todavía en secreto no podría ser contenido
en cien volúmenes como éstos, ni tampoco podría ser impartido a la presente
generación de humanos. »
(Vol. I, p. xxii)
Por
lo tanto, hay muchas cosas que todavía no pueden impartirse. Pero a pesar de
ello considero que es injusto decir hacia Blavatsky que el asunto de los rayos
“no haya sido tratado con cierto grado de significación” por ella o por sus
Maestros. Porque de hecho encontramos más de 100 referencias acerca de los
rayos en la Teosofía original:
· Más de 40
referencias en “La Doctrina Secreta” (ver The Secret Doctrine Index elaborado por John van Mater, Theosophical
University Press, 1991)
·
Más de 30 referencias en “Los Escritos
Coleccionados de Blavatsky” (ver H.P.Blavatsky Collected Writings, Index. Editado por Dara Eklund, T.P.H. 1991)
·
Más de 30 referencias en “Las Enseñanzas
del Grupo Interno”
(ver The Inner Group Teachings
of H.P. Blavatsky. Compilado y anotado
por H. Spierenburg, Point Loma Pub. 1995)
·
Y a eso debemos de
agregar las
referencias que dio el erudito hindú Subba Row.
El
problema es que hasta ahora ninguno de nosotros se ha puesto a estudiar a fondo
y recopilar todas esas referencias que dejaron Blavatsky y sus Maestros sobre
los rayos. Pero el día en que se haga, ya no necesitaremos llenar la “brecha”
con material discordante con la Teosofía, porque esa brecha es el producto de
nuestra propia carencia de estudio de la verdadera Teosofía.
3. LOS ERRORES
DE LA ENSEÑANZA DE ALICE BAILEY
Yendo
a través de las diversas publicaciones de tu revista, he encontrado a lo largo
de los años, muchos enunciados a favor y en contra de Alice Bailey, y hasta el
momento tú has logrado mantenerte neutral como moderador.
Pero
ahora al decir en tu punto tres que: “las enseñanzas de Alice Bailey presentan
lo que parecen ser supuestas divergencias”
has abandonado el papel de moderador imparcial que tenías, tomando un punto de
vista definido como editor.
Para
mí y para muchos otros investigadores que tratamos de entender y seguir las
enseñanzas de Blavatsky y sus Maestros, estas divergencias no son supuestas, sino reales.
Y
para darse cuenta de ello basta con leer el folleto escrito por Alice Cleather*
o el documento preparado por Víctor Endersby sobre la Escuela Arcana **
para darse cuenta de que la enseñanza que da Alice Bailey es una forma sutil de
distorsionar la enseñanza original aportada por los
Maestros trans-himaláyicos y sus verdaderos discípulos.
(* The
Pseudo-Occultism of Mrs. A. Bailey, por Alice L. Cleather y Basil Crump,
Manila, 1929.
** Theosophical Notes: Special Paper,
septiembre, 1963. A
Study of the Arcane School of Alice E. Bailey. Compilado por Victor Endersby, 1963)
Al grado que si “el maestro tibetano” alguna vez
realmente existió, estoy convencido que no fue un Adepto de Shambala, sino probablemente
un sacerdote jesuita enmascarado en ropaje ajeno, o alguien de alguna otra
secta cristiana que predicaba muy libremente acerca de la venida de Cristo, y desafortunadamente
hasta ahora ha sido capaz de desviar a un gran número de buenos estudiantes hacia
sus puntos de vista clericales y antropomórficos.
Pero
un estudio más profundo de las Cartas
Mahatma y
de la Teosófica Original es suficiente para demostrar sin duda alguna que Alice Bailey NO es la
continuación de Blavatsky como lo pretenden ser, sino al contrario es su antítesis.
Además
el verdadero Djwal Khul (quien fue un discípulo real del Maestro Kuthumi) nunca
habría enseñado algo contrario a la filosofía de su Maestro. Y por cierto,
¿Te has dado cuenta
que Djwal Khul aunque Alice Bailey se refiere a él como si fuera un tibetano,
en realidad era un indio de estatura alta como su Maestro?
(Pero acerca de eso
hablaremos en otra ocasión)
A) Alice
Bailey copió los errores que inventó Leadbeater
Por
otro lado, las ideas usadas por Alice Bailey son tan similares a las de
Leadbeater, que es muy fácil probar que ella adoptó las deformaciones y
falsedades que inventó Leadbeater. Y esto a pesar de que ella se haya cuidado
mucho de no mencionarlo.
C.
W. Leadbeater comenzó su interpretación psíquica de la Teosofía , después de su
regreso a Inglaterra (desde Ceilán) en diciembre de 1889. Primero residió en la
casa de A.P. Sinnett y ahí llegó a ser un miembro prominente de la Logia de Londres, ya que hacia
los años 1890 y 1891 sabemos que fue el secretario de dicha logia.
La
señora Annie Besant se unió al grupo de la Logia de Londres y a sus experimentos psíquicos
en junio de 1894. Por lo tanto fue en la Logia de Londres en donde se gestó la mayor parte
de los conceptos y terminología sui géneris de Leadbeater y Annie Besant.
En
1895 The
Theosophical Publishing Society de Londres publicó el libro “El
Plano Astral”
(The Astral Plane) escrito por Leadbeater, y desde entonces, con
el apoyo y la aprobación de la señora Besant que se convirtió en la presidenta
de la Sociedad Teosófica de Adyar, Leadbeater se convirtió en la fuente
principal de la Pseudo-Teosofía generada por dicha organización.
(Este
pequeño libro “El Plano Astral” es importante ya que enuncia
claramente la posición espiritista y errónea de Leadbeater con respecto a este
asunto.)
Y
aunque el libro “Los
Maestros y el Sendero” (The Masters and the Path) de Leadbeater y “Un
Tratado Sobre el Fuego Cósmico”
(A Treatise on Cosmic Fire) de Bailey fueron publicados en el mismo año
(en 1925) las ideas de Leadbeater son mucho más antiguas, ya que su libro “Los
Maestros y el Sendero” tal como lo indica una nota del editor:
-
“está
basado en las disertaciones que Leadbeater dio a los miembros de la Sociedad Teosófica.”
Y
estas disertaciones las dio en muchos países del mundo especialmente en los
Estados Unidos, en donde tuvo un fuerte impacto.
Su
libro “La
Ciencia de los Sacramentos” (The Science of the Sacraments) en donde se
enuncian ideas muy similares a las de los dos anteriores, fue publicado en
1920.
Y
curiosamente vemos que la señora Bailey reproduce en su “Fuego Cósmico” (“Cosmic Fire”) varios diagramas de Annie
Besant y Leadbeater tomados de la revista “The Theosophist” de
diciembre de 1899 [A Treatise on
Cosmic Fire, pp.56, 1230] y de enero de 1900. [A Treatise on Cosmic Fire, p.
94]
Es
probable que algunos lectores no estén informados de que a pocos meses después
de la muerte de Blavatsky, Annie Besant comenzó a alterar la obra de su maestra
(de la que había sido alumna por escasos dos años).
Posteriormente
Leadbeater se unió a su tarea destructiva, cambiando el significado de los
términos, introduciendo una visión espiritista, ritualista y antropomórfica de
la Teosofía, y forjando de hecho un nuevo y diferente sistema y que con toda
propiedad puede denominarse de pseudo-teosófico.
Así
por ejemplo en los diagramas mencionados más arriba, a principios del siglo
veinte, ya podemos ver la nueva clasificación de los Planos Cósmicos y de los
Principios Humanos utilizados por la señora Besant y el señor Leadbeater, y los
cuales la señora Bailey siguió fielmente.
Alice
Bailey sigue a Besant y a Leadbeater, pero lo oculta; y aunque anuncia en voz
alta que sigue a Blavatsky, de hecho no lo hace. Y esto se debe a causa del
desprestigio que tuvo Leadbeater en los Estados Unidos por sus escándalos
sexuales, por lo tanto a la señora Bailey no le convenía que se supiese de
donde había tomado el germen de sus elucubraciones. Sin embargo, muchos de sus
seguidores no son conscientes de esto.
Pero
el hecho innegable de que la señora Bailey use la terminología de Leadbeater y
Besant invalida sus pretensiones de que su obra sea una continuación de “La Doctrina
Secreta”, ya que
dicha terminología es indudablemente una barrera que imposibilita la
comprensión de la Teosofía auténtica.
Para
un análisis completo de las discrepancias entre la terminología de la Teosofía original y la
nueva terminología que usan Leadbeater y Besant, les recomiendo que lean: “¿El
Doble Etérico? Efectos
Trascendentes de un Supuesto Falso” [The Etheric Double? The Far
Reaching Effects of a False Assumption] escrito por Geoffrey Farthing.
B) Hay también un sabor muy
similar con respecto al papel de la iglesia entre Bailey y Leadbeater.
Así
por ejemplo:
Alice Bailey escribe en su libro “Iniciación
Humana y Solar”, Capítulo I, p.9, publicado en 1922.
« Antes de que pasen
muchos siglos los antiguos misterios serán restaurados, y un grupo interior
existirá en la iglesia. … El núcleo ya se está formando. … En esta ceremonia
aquéllos que estén listos para la iniciación serán admitidos públicamente por
uno de sus miembros, autorizado por el mismo gran Hierofante. »
Y C.W. Leadbeater escribe en la revista “The Theosophist” de
1917.
« El futuro de la Iglesia está en el Séptimo
Rayo (el rayo de la magia ceremonial) el cual está comenzando a dominar al
mundo. El Mismo Señor que fundó la
Iglesia , está viniendo a visitarla una vez más. »
C) Mismas ideas con los rayos
Comparemos
algunas ideas en ambos sistemas sobre el tema de los Rayos. Ambos toman como
origen de su información a un supuesto tibetano. (Ver: “Los Maestros y el
Sendero”, p. 228, y “Un Tratado sobre el Fuego Cósmico”,
p. ix)
-
Ambos colocan un Maestro a la cabeza de cada
Rayo.
-
Las supuestas cualidades de cada Rayo son las
mismas en ambos sistemas.
-
Ambos enfatizan el 6° Rayo (supuestamente de
la devoción) y el 7º Rayo (supuestamente de la magia ceremonial) como una forma
para apoyar sus puntos de vista comunes respecto a la supuesta venida del
Cristo.
Por
otra parte, Leadbeater pretendía que T. Subba Row había sido uno de sus instructores,
al grado que C. Jinarajadasa en el Prefacio de la Sección VII intitulada
“Las Enseñanzas Esotéricas de T. Subba Row” dice que:
« Las pláticas que dio
Subba Row a un círculo íntimo fueron tomadas en apuntes por algunos de ellos. Y
entre sus oyentes estaban el Dr. Subramania Iyer, C.W. Leadbeater y A.J. Cooper-Oakley…»
Y
como el tema de los Rayos ocupa un lugar prominente en las enseñanzas de Subba
Row, valdría la pena que le siguiéramos la pista a las ideas de Leadbeater en
los escritos de Subba Row.
Veamos:
C.W.
Leadbeater escribió:
« La Característica del Sétimo
Rayo es la Magia :
Magia Ceremonial. (Lo que implica la cooperación con el Reino Deva). Y también
es la Última Religión: Adoración elemental.
.
. .
Mientras
que el hombre del Séptimo Rayo podría usar magia ceremonial elaborada, y
probablemente invocaría la ayuda de espíritus no humanos si fuera posible. »
(Masters and the Path, p. 229 y 236)
« Al incensar cada
vela, el Sacerdote debe pensar en el Rayo con determinación para tratar de
desarrollar dentro de sí mismo la cualidad especialmente perteneciente a ese
Rayo. … 1. Fuerza,
2. Sabiduría,
3. Adaptabilidad o Tacto, 4. Belleza, 5. Ciencia
(conocimiento detallado), 6. Devoción,
7. Servicio Ordenado (ceremonial que invoca
ayuda angélica). »
(Ciencia de los Sacramentos, p. 90)
Mientras
que Subba Row escribió:
« A este respecto sería
necesario decir unas cuantas palabras en relación a la verdadera naturaleza de
la muerte del alma y del destino final de un mago negro.
.
. .
Hay
tres maneras por las que un alma puede dejar de conservar su individualidad
especial siendo una de ellas cuando se coloca en
afinidad con
una existencia espiritual o elemental por invocarla. ... Y en tales casos ella
transfiere su individualidad a dicha existencia y es absorbida dentro de ella...y
viviendo en dicho ser continúa así hasta el final del Manvantara. ... En cierta
forma esto significa adquirir inmortalidad en el mal.
.
. .
Es
imposible decir que el hecho de pertenecer a uno de estos rayos indique la
presencia en el hombre de alguna cualidad moral o mental específica, como la
paciencia, la honestidad, o el valor por un lado, o las facultades poéticas o
artísticas por el otro. »
(Esoteric Writings, p. 267-268 y 108)
En
esta muy breve comparación, entre Leadbeater y su supuesto maestro Subba Row,
nosotros no solamente vemos una diferencia de ideas sino también del Sendero
seguido por cada uno de ellos.
De
acuerdo a Subba Row, la adoración de elementales y la invocación de espíritus
no humanos (que Leadbeater dice que es “la Religión y la cualidad característica
del Séptimo Rayo”) esta practica es una de las tres formas que pueden acarrear
la muerte del alma y que conducen hacia la magia negra. Y como la señora Bailey
se adhiere casi al pie de la letra a estas ideas, queda claro que su sistema (inconscientemente
para sus estudiantes) conduce a la misma meta fatal.
A
todo lo largo y ancho de los escritos de Alice Bailey se encuentra la presencia
de las ideas de Leadbeater, especialmente en su “Tratado sobre el Fuego Cósmico” en donde a cada página
subyacen conceptos y terminología que han sido tomados de él.
Y
al igual que Geoffrey Hodson (quien fue un alumno de Leadbeater) ella utiliza también
términos como “el doble etérico,” “el alma grupal,” el concepto de una “evolución
deva” independiente de la humana que corre por líneas paralelas a la humana,
(ver su “Tratado”, p. 910-911).
Lo cual es algo claramente contrario a la Tradición Esotérica
y a lo enunciado por H.P. Blavatsky en la Recapitulación de “La Doctrina
Secreta”. (Vol. I,
pp. 274-276)
Bailey
habla mucho acerca de los Rayos, de la importancia de la Iglesia y de la pronta venida
de Cristo usando un lenguaje y conceptos similares a los de Leadbeater. Pero todas
estas ideas son completamente contrarias a la auténtica Teosofía que enseñaron
y dejaron por escrito H.P.B. y sus Maestros.
Y
a continuación les doy algunos ejemplos de ello:
a) Un ejemplo de cómo
Alice Bailey le copió a Leadbeater lo que este inventó sobre los rayos, lo
muestro a continuación con el “Rayo Ceremonial”.
C.W.
Leadbeater
Los Maestros y el
Sendero,
p.248
|
Alice
Bailey
Tratado sobre Fuego
Cósmico,
p.911
|
“El
Rayo que ahora está tomando fuerza es en gran medida el del ceremonial.”
|
“Con
la llegada del rayo ceremonial, tenemos la amplificación de la vibración
violeta.”
|
b)
Analizando la siguiente cita, yo no veo cómo podríamos llenar la supuesta
laguna dejada por la Teosofía ,
usando los materiales de Leadbeater y de Bailey, ya que los conceptos que ellos
usan son diametralmente opuestos con lo que enseña la Teosofía como lo
demuestro a continuación:
C.W.
Leadbeater
Los Maestros y el
Sendero,
p.258.
|
H.P. Blavatsky
Collected Writings, Vol. XIII, p.72
|
“Existe
la posibilidad de cambiar el Rayo al que pertenecemos por medio de una firme
determinación, lo que deja abiertos todos los senderos al estudiante de lo oculto.”
|
“La
estrella bajo la cual nace una entidad humana, dicen las enseñanzas ocultas,
permanecerá para siempre su estrella, a través de todo el ciclo de
encarnaciones del Manvantara.”
|
c) Alice Bailey y Leadbeater ponen cualidades muy similares a los Rayos
C.W.
Leadbeater
|
Alice
Bailey
Tratado sobre el Fuego
Cósmico,
p.5
|
I.
Fuerza
II.
Sabiduría
III.
Adaptabilidad o tacto
IV.
Belleza y Armonía
V.
Ciencia (conocimiento detallado)
VI.
Devoción
VII.
Servicio Ordenado (ceremonial por el que se invoca la ayuda angélica)
|
I.
Voluntad
II.
Sabiduría
III.
Inteligencia Activa
IV.
Armonía, Belleza y Arte
V.
Conocimiento concreto o ciencia
VI.
Devoción
VII.
Ceremonial, magia, orden
|
d) Pero la definición
que le dan a esas cualidades difiere de la definición que da la Teosofía
original y un ejemplo de ello es la definición que dan del conocimiento.
Hay
que observar muy bien que la
Ciencia para ambos sistemas (tanto el de Leadbeater como el
de Alice Bailey) es solamente conocimiento concreto, o sea la ciencia material.
Pero como lo precisa el Maestro Kuthumi, para la Teosofía, la Ciencia
trasciende lo material:
« Nuestro Conocimiento
y Ciencia no pueden proseguirse del todo con los métodos Baconianos. »
(Cartas Mahatma, p. 355)
En
cambio Bailey y Leadbeater no se refieren al conocimiento como Gnosis o
Conocimiento Teosófico Divino o Ciencia.
En
las páginas de “Un Tratado sobre el
Fuego Cósmico”, la señora Bailey da su definición de lo que para ella
es el conocimiento:
« Conocimiento es la
aprehensión correcta de las leyes de la energía, de la conservación de la
fuerza, de las fuentes de energía, de sus cualidades, sus tipos y vibraciones.
Esto involucra una aprehensión de:
- las
diferentes vibraciones clave.
- los
centros por donde por necesidad esta energía entra.
- y los
canales a lo largo de los cuales circula.
»
(p.
879 y 880)
De
lo anterior se desprende que ella está hablando acerca del uso y manipulación
de la energía en relación a: (1) leyes, (2) conservación, (3) fuentes, (4)
cualidades, (5) tipos, (6) vibraciones. Por lo tanto ella se encuentra
completamente en la esfera de lo práctico y concreto, pero no de lo físicamente
concreto, sino psíquicamente, ya que a ella le interesa la circulación de la
energía a través de los centros y canales, y una cierta clave de vibración.
Su
definición del amor en la siguiente página 881, redondea el concepto, debido a
que para ella:
« El amor es la aprehensión
correcta de los usos y propósitos de la forma. »
Y
nuevamente nos encontramos en la esfera de lo concreto y material, debido a que
su definición pertenece a los niveles de la forma en el Cosmos, e incluso si ella
más adelante habla de las “Leyes de Atracción y Repulsión”, ella termina su
idea diciendo que el amor “involucra un entendimiento de todas las formas, de
los propósitos de la forma, y de las relaciones de la forma”.
Es por lo tanto una
definición materialista del amor.
Habiendo
dado su propia definición de lo que es el conocimiento para ella, Bailey luego
recurre a “La Doctrina Secreta” para pretender apoyarse. Y de esta manera,
en las páginas 879 y 880 de su “Fuego Cósmico”
están apiñadas con más de seis referencias haciendo alusión a “La Doctrina
Secreta”, y digo “haciendo alusión” deliberadamente
porque esas frases no son totalmente genuinas
debido a la forma en que se encuentran escritas.
Estas
referencias se presentan:
1)
sin corchetes que indiquen el material citado
y el que no lo es,
2)
son incompletas en la mayoría de los casos y
3)
algunas no son notas fieles sino
reinterpretaciones.
Por
ejemplo:
Tratado
sobre el Fuego Cósmico
|
Doctrina
Secreta, Tercera edición, 1897, p.299
|
“2.
DS, I, 299, 3ª. Ed. 1897 [DS, I, 278, Ed. 1888]”
|
“Este
es el punto de vista de cada una de las seis grandes escuelas de filosofía
inda los seis principios de ese cuerpo unitario de sabiduría del cual la
‘Gnosis’, el conocimiento oculto, es el séptimo.” [DS, I, 278, Ed. 1888]
|
Algunas
de las citas son sistemáticamente alteradas con una profusión de
interpolaciones. Ver por ejemplo en la página 880 del “Fuego Cósmico” su
referencia a “La Doctrina Secreta”
I, 3ª Edición página 192, en la que ella interpola sus comentarios sobre cada vidyâ sin señalamiento de citas. Y en el
caso de la cuarta vidyâ que es Âtma Vidyâ ella únicamente cita la
frase: “Verdadera Sabiduría Espiritual”, olvidando agregar la muy importante
explicación que dio Blavatsky de que:
« Es solamente esta
última, “Âtma Vidyâ” o la verdadera
sabiduría espiritual y divina, la que puede arrojar una luz absoluta y final
sobre las enseñanzas de las tres primeras que han sido nombradas
precedentemente. »
(Doctrina
Secreta I, p.169)
Veamos
ahora la definición de conocimiento de acuerdo a H.P. Blavatsky:
« El Conocimiento, en
el verdadero sentido del término, es la capacidad del intelecto, es decir, es
la percepción espiritual. En pocas palabras, la individualidad superior del
hombre, compuesta por su Manas superior, y el sexto, y séptimo principios,
deben de trabajar como una unidad, ya que solamente así se puede obtener la “sabiduría
divina”, puesto que las cosas divinas sólo pueden ser percibidas por la facultades
divinas. »
(Collected
Writings, VI, p. 241)
« Pero no será sino
hasta que la unidad se funda en el TODO, ya sea en este o cualquier otro plano,
y que de igual manera desaparezcan el sujeto y objeto en la absoluta negación
del estado Nirvánico (negación, sin embargo, sólo desde nuestro plano),
escalando hasta la cumbre de la
Omnisciencia —el conocimiento de las cosas en sí mismas. »
(Doctrina
Secreta I, p. 330)
« El verdadero
conocimiento es del Espíritu y sólo está en el Espíritu, y no se puede adquirir
de ninguna otra forma excepto a través de la región de la mente superior, el
único plano a partir del cual podemos penetrar en las profundidades de la Absolutez que todo lo
llena. »
(Instrucción Esotérica I, p.
21-22)
Como
lo pueden constatar, Blavatsky habla de un conocimiento superior al simple
conocimiento concreto.
4. CONCLUSIÓN
Y es así como nos
enfrentamos a dos sistemas de pensamiento, de entrenamiento y de metas
completamente diferentes. Uno usa la percepción espiritual, mientras que el
otro usa la aprehensión psíquica. Uno usa la mente superior, mientras que el
otro usa la mente inferior y concreta. Uno pone su confianza en las facultades
divinas, mientras que el otro lo pone en la magia ceremonial, la iglesia, la
venida de Cristo y la invocación de elementales.
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